El Espejo hiperespacial pasó por la ciudad de Rosario .
Pequeñas intervenciones urbanas
miércoles, 18 de enero de 2012
El Espejo Hiperespacial
En el “Espejo Hiperespacial” abordamos desde el absurdo, la comunicación de redes y lo femenino, el cruce entre lo público y lo privado.
En esta performance indagamos sobre la comunicación virtual por medio de la videoconferencia, y las nuevas relaciones espacio- temporales que este dispositivo habilita y delimita. Nos incorporamos, a través de una pequeña intervención urbana, en esta forma relacional que surge en los bares contemporáneos en donde las personas asisten solas, dispuestas a entablar una reunión, una conversación o una comunicación virtual.
La acción del espejo hiperespacial consiste en la realización de una sesión de maquillaje, en la que cada una de las dos performers utiliza las pantalla de su laptop interconectada vía WIFI y como si fuera un espejo, se maquilla en la mirada de la otra sin verse a sí misma. Guiadas por la acción performática de quien es su reflejo virtual, obteniendo el resultado de un maquillaje distorsionado, sobrecargado y desdibujado, a causa de buscar la belleza individual en las formas externas.
Nos interesó tomar el maquillaje como representación de lo femenino y como ritual cotidiano vinculado al espacio privado trasladado al espacio público.
El maquillaje alude a la naturaleza construida de la imagen, y a las divergencias reales en cuanto al canon de belleza femenina que el mercado construye, de las comunicaciones a grandes distancias con la complejidad contextual de cada una de ellas y de lo cotidiano de la reunión en un bar desterritorializado hacia lo virtual.
En cuanto a la obra en tanto tal, se presenta como algo que integra al espectador como co-formador; su delimitación que incluye el espacio diferido, la hace inasible y variable. La obra performática en sí misma no se encuentra en ninguno de los dos lados de forma separada, o en todo caso está configurada por un real virtual duplicado, en dos espacios, con contextos diferentes y entrelazados. Nuestro proceso de producción basado en la observación de lo cotidiano consistió en este caso, en pasar una acción de lo privado - como es la de maquillarse - a lo público, modificando de forma mínima , el uso de la computadora portátil en los bares .La sustitución de la acción cotidiana, produce una identificación del uso naturalizado, por lo tanto propicia la toma de conciencia de la conciencia práctica, posibilitando una reflexión acerca de los modos de comunicación que las nuevas tecnologías instauran, y las modificaciones interrelacionales que producen.
Usamos el cuerpo interviniendo un espacio mecanizado, como forma de activar aquello que parece imperceptible en la intimidad de los actos cotidianos, con el fin de propiciar nuevas maneras de ser y estar en el mundo. Combinamos las metodologías en nuestra praxis, vinculadas a dinámicas de cruce de lenguajes artísticos en donde el mundo real y el virtual confluyen, retroalimentándose, haciendo emerger mundos artificiales hacia una mejor comprensión de las relaciones sociales, de la convivencia en la ciudad, y hacia una vivencia consciente de nuestra cotidianeidad.
Usamos el cuerpo interviniendo un espacio mecanizado, como forma de activar aquello que parece imperceptible en la intimidad de los actos cotidianos, con el fin de propiciar nuevas maneras de ser y estar en el mundo. Combinamos las metodologías en nuestra praxis, vinculadas a dinámicas de cruce de lenguajes artísticos en donde el mundo real y el virtual confluyen, retroalimentándose, haciendo emerger mundos artificiales hacia una mejor comprensión de las relaciones sociales, de la convivencia en la ciudad, y hacia una vivencia consciente de nuestra cotidianeidad.
lunes, 30 de mayo de 2011
Iniciando el viaje urbano.
Nuestro primer encuentro fue a la 13:30 hs , en el Parque Centenario de la ciudad de Buenos Aires un 22 de Febrero del año 2011, cerca a la calesita.Caminamos y observamos qué nos proponía el lugar la presencia del agua y las rayuelas desgastadas . Buscábamos tal vez, huellas de hechos simbólicos, de esos que imprimen los habitantes del mundo a su paso. Entre risas y palabras al viento húmedo, nos acercamos al borde del lago, no había peces pero los imaginamos. Una semana después, regresamos de pesca!
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